At Zoo Lujan, visitors can interact in an up-close, hands-on manner with some of the most powerful predators in the animal kingdom, including lions, tigers, and bears. Except, here at Zoo Lujan, they behave more like house pets than predators. According to publicity pictures and interviews, the animals seem to enjoy the petting and feeding. They tolerate the photo taking. The zoo has been open since 1994 without any reported attacks on humans.According to those that run the zoo, part of the reason the animals are so docile is because they’re raised from the time they’re tiny babies with dogs. They see the positive relationship between the humans and the dogs and learn to interact in the same way. Dr. Daniel Mudrovici, a vet that takes care of some of the animals at the zoo, says that the prey drive of these predators has been greatly reduced by being well fed.
Animal rights activists dispute these claims, arguing that what the zoo is doing is exploitative of the animals, as well as irresponsible and dangerous to the visitors.
Some insist that it is only a matter of time before there is a serious mauling, and others hint that there have been incidents that have been covered up, though they offer no evidence of their claims. Another claim made by some activists is that the animals are heavily sedated. A petition drive is one way they’ve been seeking to close the zoo down.
For now, the zoo remains open, attracting an international mix of tourists. Many speak highly of the experience, which is understandable. It must be quite amazing to see such powerful creatures so close. However, others feel uneasy about the ethics of it, domesticating these great creatures to live in ways that are completely unnatural on multiple levels. When you come for Spanish lessons in Buenos Aires, you may want to see for yourself what the situation is at Zoo Lujan.
En el Zoológico de Luján, los visitantes pueden interactuar de manera muy cercana con algunos de los depredadores más poderosos del reino animal, incluyendo leones, tigres y osos. La diferencia es que en el Zoológico de Luján estos se comportan más como mascotas que como depredadores. De acuerdo con las fotografías publicitarias y algunas entrevistas, los animales parecen disfrutar de que los acaricien y los alimenten; además aceptan que los fotografíen. El zoológico ha estado abierto desde 1994 sin ningún reporte de ataque a humanos.De acuerdo con los administradores del zoológico, una de las razones por las que los animales son tan dóciles es que fueron criados con perros cuando eran bebés. Ven la relación positiva entre los humanos y los perros y aprenden a interactuar de la misma manera. El Dr. Daniel Mudrovici, un veterinario que está a cargo de algunos de los animales del zoológico, dice que el instinto de cazar se ha reducido considerablemente al estar bien alimentados.
Los activistas de los derechos de los animales contradicen estas afirmaciones, argumentando que lo que el zoológico hace es explotar a los animales; también dicen que es irresponsable y peligroso para los visitantes.
Hay quienes insisten en que es solo cuestión de tiempo antes de que haya serios maltratos y otros dicen que han ocurrido incidentes pero se han ocultado, aunque no tienen ninguna evidencia para apoyar sus afirmaciones. Otra crítica de algunos activistas es que los animales están fuertemente sedados. Entre otras cosas, están llevando a cabo una campaña para cerrar el zoológico.
Por ahora, el zoológico permanece abierto, atrayendo a una mezcla internacional de turistas. Muchos hablan muy bien de la experiencia, lo cual es comprensible; debe ser asombroso ver semejantes criaturas tan de cerca. Sin embargo, algunos no se sienten cómodos con la ética de domesticar a estas grandes criaturas para que vivan de una manera completamente antinatural. Cuando vengas a estudiar español a Buenos Aires, querrás ver por ti mismo como está la situación en el Zoológico de Luján.